Las tomas de Barbieri son impresionantes y mágicas, de ensueño y juguetonas, irónicas y teatrales. Disparos de seducción. La superficie lisa de la imagen se convierte en un "objeto seductor", una invitación emocionante para imaginar y fantasear. Todo un territorio lleno de misterios, listo para que el ojo explore y descubra.
Sesenta años antes de los teléfonos inteligentes e Instagram, Gian Paolo Barbieri usaba su cámara Polaroid para capturar impresiones de la vida en el lugar que más tarde podrÃa incorporar a su arte.
Muchas de estas fotografÃas pequeñas e Ãntimas transmiten ternura y vulnerabilidad, otras representan una dureza e inmediatez.
A diferencia de las imágenes altamente elaboradas que Barbieri organizó en el estudio y se hicieron famosas, estas imágenes están marcadas por la espontaneidad y la invención. Juntos, ofrecen una visión de la gran carrera del artista.
